Cuando va terminando el frío y se acerca la primavera es el momento en el que hay que estar alerta para que nuestros Perros no se acerquen a estas orugas, son muy peligrosas, tanto para los perros como para los humanos.
Cada vez hay más y, su radio de acción se está acercando a las áreas urbanas.
Aunque donde suelen estar es en los pinares también las podemos encontrar en jardines y parques públicos en casi todas las ciudades, tanto de la Península como de Baleares.
¿Por qué se llaman procesionarias? ¿Cómo reconocerlas?
En la wikipedia lo explican: Tras alimentarse durante unos 30 días las orugas descienden al suelo desde sus nidos en características filas indias (de ahí su nombre común de "procesionarias"). Se desconoce la causa pero está comprobado que es siempre una hembra (una larva que originará un adulto hembra) la que guía la procesión.
Son extremadamente venenosas: producen urticarias y alergias en personas y en animales.
El riesgo está al tocarlas o al acercarse mucho a ellas, sus pelos urticantes son como dardos envenenados y tiene cientos de miles: cuando se sienten amenazadas los sueltan. Por eso no hace falta haberlos tocado para verse afectado.
Si tu perro olisquea o, peor, lame a una de estas orugas debes llamarnos inmediatamente.
¿Cómo saber si tu perro ha estado en contacto con una procesionaria?
Estará tratando de rascarse la boca porque le dolerá y como si quisiera arrancarse algo de la lengua con las garras o salivando profusamente. Los síntomas visibles son la inflamación de labios, boca e incluso de la cabeza.
¿Qué hacer?
Puedes lavarle la boca con agua templada pero lo más importante es llamar rápidamente al veterinario para que puedan dar a tu perro un tratamiento adecuado.
El resultado puede ser desde la necrosis de parte de la lengua a la muerte: si la infección llega a la laringe puede morirse por asfixia.
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